Durante un jaripeo celebrado como parte de las fiestas patronales de Acajutla, Sonsonate, un niño de 10 años resultó con quemaduras provocadas por pólvora. El menor fue atendido de inmediato por Comandos de Salvamento, quienes le brindaron atención prehospitalaria antes de trasladarlo a un centro asistencial.
El lamentable incidente nos recuerda la urgencia de extremar medidas de seguridad en eventos públicos, especialmente donde hay menores de edad.
Hacemos un llamado a padres, organizadores y autoridades a reforzar la vigilancia y proteger a los niños en todo momento. Su seguridad debe ser siempre la prioridad.